LA ABERRACIÓN, LLAMADA ENCUENTRO HISTÓRICO DE LA HABANA

Medellín, septiembre 24 de 2015 LA ABERRACIÓN, LLAMADA ENCUENTRO HISTÓRICO DE LA HABANA "QUE GUSTA MÁS, LO DE HACE DOS HORAS, O LO QUE SE ACORDÓ" Pregunta con algo de estupidez de JULIO SÁNCHEZ CRISTO, al SENADOR RANGEL. Obviamente el SENADOR, en los términos de la pregunta, tan dirigida y sin otra opción, mantuvo la postura que la lógica le imponía. Y es que el problema no es de hace dos horas, o de "ya". El problema son los DERECHOS HUMANOS. ¿Qué lo que pasó ayer 23 de septiembre es un hecho histórico? Quien podría asegurar, sin temor a equívocos, que las ESTUPIDECES, no pueden ser también históricas. Qué la claudicación; la humillación y el desmoronamiento del Estado de Derecho, no es un hecho HISTÓRICO. La izquierda fascista, y hasta la moderada (no se puede dudar que también la hay), nos quieren vender la IDEA, de la PAZ, por la PAZ, y sin consideraciones de fondo, para meternos de lleno a la forma que "legitime" a unos terroristas y sus pretensiones de hacerse al poder de facto, utilizando como sofisma, el modelo de derecho, que precisamente desconocen, so pena de no firmar nada y seguir con lo mismo. Lo que de suyo es una MENTIRA que se apresuran que se pacte, para no caer en el "NOS COGIERON LA CAÑA" y ahora a someternos sin excusa. Nada se termina, hasta que se termina y nada se ha firmado hasta que se firme. O por lo menos, eso siempre se ha dicho, y si somos consecuentes, lo único histórico, es la postura ARRODILLADA de un MANDATARIO de COLOMBIA, ante el jefe TERRORISTA, más infame y despiadado que tiene el mundo de hoy. El jefe del cartel narcotraficante más grande del "GLOBO" terráqueo; el jefe terrorista con más violaciones a los Derechos Humanos, más delitos de LESA HUMANIDAD; crímenes de guerra, reclutamiento de menores, ajusticiamientos, secuestros, tráfico de órganos, de armas y trata de personas, extorsiones, violaciones de niños y niñas, desapariciones forzadas, desplazamiento de personas, etc, etc y etc. CLARO QUE EL 23 DE SEPTIEMBRE de 2015 pasará a la HISTORIA, como un DÍA "HISTÓRICO"; dónde la ignominia cobro fuerza y si hizo mucho más cruel y real, la HUMILLACIÓN y entrega de todo un PUEBLO, al dominio del TERROR. ¿Qué lo más parecido a éste infierno y vejamen, fue el pacto de realito? ¿Acaso entonces, será que sabrán que significa "PARECIDO? PARECIDO. PARECIDA, -da adj. 1 Que se parece a otra persona o a otra cosa: Luisa y su hermana son muy parecidas; este vestido es parecido al mío. semejante, similar. diferente, distinto. — s. m. 2 Conjunto de características comunes que tienen dos cosas o personas que se parecen: el parecido de esta niña con su madre es sorprendente. semejanza, similitud. ¿En qué se parece una CÁRCEL - INTRAMURAL, a un RESORT; A UNA ZONA DE despeje, con más de cien mil policías y militares de guardaespaldas? DEFINICIÓN DE RESORT Como muchos otros conceptos, resort es un término de uso frecuente en nuestra lengua aunque no es reconocido por la Real Academia Española (RAE). Se trata de una palabra inglesa que hace referencia a un complejo turístico. ¿Hasta dónde les llegará la CREENCIA de que el PUEBLO de COLOMBIA, es ESTÚPIDO? No nos estamos acercando a NINGUNA PAZ...; nos estamos acercando, cada vez más, a la degradación y a la putrefacción, de unos pseudo dirigentes, que a cualquier costo, quieren vender el país, y por ahí derechito, ganar réditos que los hagan pasar a la historia, pero como piltrafas despreciables, que unieron sus mentalidades mezquinas y oprobiosas, para someter al imperio de la barbarie disfrazada de paz, a todo un pueblo, y de esta manera perpetuar el aniquilamiento de la raza humana en esta parte del continente. ¿DEJACIÓN DE ARMAS? ¿acaso en el RESORT?. ¿Porqué no se habla de entrega de armas y sometimiento al Estado de Derecho y a las fuerzas regulares del Estado? ¿Marco Jurídico para la paz - Justicia Restaurativa - Transicional - ? ¿Qué es eso, si es, lo que se le ha vendido a todo un pueblo que es, o por el contrario, se interpreta diferente, para aplicarla convenientemente? Veamos que es JUSTICIA TRANSICIONAL. La justicia transicional es el conjunto de medidas judiciales y políticas que diversos países han utilizado como reparación por las violaciones masivas de derechos humanos. Entre ellas figuran las acciones penales, las comisiones de la verdad, los programas de reparación y diversas reformas institucionales. La justicia transicional no es un tipo especial de justicia sino una forma de abordarla en épocas de transición desde una situación de conflicto o de represión por parte del Estado. Al tratar de conseguir la rendición de cuentas y la reparación de las víctimas, la justicia transicional proporciona a las víctimas el reconocimiento de sus derechos, fomentando la confianza ciudadana y fortaleciendo el Estado de derecho. ¿Por qué es importante la justicia transicional? Cuando se cometen violaciones masivas de los derechos humanos, las víctimas tienen el derecho, oficialmente reconocido, a ver castigados a los autores de los mismos, a conocer la verdad y a recibir reparaciones. Como las violaciones de derechos humanos sistemáticas no solo afectan a las víctimas directas sino al conjunto de la sociedad, además de cumplir con esos compromisos los Estados deben asegurarse de que las violaciones no vuelvan a suceder, y, en consecuencia, deben especialmente reformar las instituciones que estuvieron implicadas en esos hechos o fueron incapaces de impedirlos. Las sociedades que no se enfrentan a las violaciones masivas de los derechos humanos suelen quedar divididas, generándose desconfianza entre diferentes grupos y frente a las instituciones públicas y obstaculizándose o haciéndose más lentas las mejoras en materia de seguridad y desarrollo. Esa situación pone en cuestión el compromiso con el Estado de derecho y, en última instancia, puede conducir a la repetición cíclica de diversos actos de violencia. Como se puede apreciar en la mayoría de los países que sufren violaciones masivas de los derechos humanos, las demandas de justicia se niegan a "desaparecer". Elementos de una política de justicia transicional integral. Los elementos que componen las políticas de justicia transicional no constituyen una lista azarosa, sino que están interrelacionados práctica y conceptualmente. Los más determinantes son: Las acciones penales, sobre todo contra los criminales considerados de mayor responsabilidad. Las reparaciones que los Gobiernos utilizan para reconocer los daños sufridos y tomar medidas para abordarlos. Esas iniciativas suelen tener un componente material (como los pagos monetarios o los servicios sanitarios), así como aspectos simbólicos (como las disculpas públicas o los días del recuerdo). La reforma de instituciones públicas implicadas en los abusos -como son las fuerzas armadas, la policía y los tribunales-, con el fin de desmantelar, con los procedimientos adecuados, la maquinaria estructural de los abusos y evitar tanto la repetición de violaciones de derechos humanos graves como la impunidad. Las comisiones de la verdad u otras formas de investigación y análisis de pautas de abuso sistemáticas, que recomiendan cambios y ayudan a comprender las causas subyacentes de las violaciones de derechos humanos graves. No estamos ante una lista cerrada. Cada país va incorporando nuevas medidas. La memorialización, por ejemplo, que se compone de diversas iniciativas destinadas a mantener viva la memoria de las víctimas mediante la creación de museos y monumentos, y otras medidas simbólicas como el cambio de nombre de los espacios públicos, se ha convertido en parte importante de la justicia transicional en la mayoría de los países del mundo. A pesar de que las medidas de justicia transicional se asientan en sólidos compromisos jurídicos y morales, los medios para satisfacerlos son muy diversos, de modo que no hay una fórmula única para todos los contextos. El papel del ICTJ El Centro Internacional para la Justicia Transicional trabaja en más de 30 países ayudando a las necesidades locales a conocer experiencias de otras latitudes. Aportamos nuestra capacidad técnica y nuestra experiencia a todos nuestros lugares de trabajo, desarrollando nuevos conocimientos gracias a colaboradores locales. <<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<<< No es, entonces, como dicen que es, y como venden la idea, para aplicarla de manera conveniente y cómplice a los terroristas. No es una TRANSICIÓN que permita que en ese sobre paso, nos olvidemos de los DELITOS DE LESA HUMANIDAD - DE LOS CRÍMENES DE GUERRA - DE LA DESAPARICIÓN FORZADA - DEL TERRORISMO - DEL RECLUTAMIENTO Y VIOLACIÓN SISTEMÁTICA DE MENORES, ETC. NO. La justicia TRANSICIONAL, no se diseñó para los VICTIMARIOS y su favorecimiento. Su diseño y creación, está dada para las VÍCTIMAS del HOLOCAUSTO y para asegurar y garantizar su reparación; tanto social, como emocional, familiar, económica, etc. ¿Entonces? Podemos hablar de JUSTICIA TRANSICIONAL, pero para la adecuada y mentalizada, aceptación, en los precisos términos de reparación, fortalecimiento de derechos, de confianza, y de CASTIGO real y efectivo de los victimarios, sin esguinces o moldes acomodados que la hagan nugatoria, irreal y mentirosa. Y JUSTICIA RESTAURATIVA, como el reencuentro de VÍCTIMAS y VICTIMARIOS, en plena disposición de reintegrarse a la vida en sociedad y ser actores de los mismos, pero previo el reconocimiento de sus delitos, y el ejercicio del Estado sobre ellos del Ius Puniendi, dentro de los cánones de las leyes internas y el Derecho Internacional. Y en cuanto a las penas: Una vergüenza. De cinco a ocho años y los que no reconozcan los hechos hasta 20. Y por qué no, hasta sesenta. Justicia Ordinaria, y extradición para los casos que lo ameriten de acuerdo a las exigencias de otros Estados y los tratados internacionales. Una, más entre muchismas, burlas, que nos han “METIDO”, estos sátrapas vendidos y apátridas del GOBIERNO. ¿Y A ESTO LLAMAN DÍA HISTORICO PARA LA PAZ DE COLOMBIA? Decirle VERGÜENZA ES POCO. Cualquier calificativo de ahí, para arriba, siendo poco, será valioso y aporte al descubrimiento de la IGNOMINIA más grande del siglo 20 – 21, y no precisamente del SOCIALISMO CASTROCHAVISTA – COMUNISTA. Hay mucho más por decir, pero por hoy, dejémoslo así, que esto no tiene como agotarse, como diría HONREC DE BALZAC, en su PIEL DE ZAPA.