LA TRAICIÓN DE PIEDAD E. CÓRDOBA RUÍZ Y LA COMPLICIDAD DEL FISCAL GENERAL

Medellín, 27 de julio de 2012 LA TRAICIÓN DE PIEDAD ESNEDA CORDOBA RUÍZ Y LA COMPLICIDAD DEL FISCAL GENERAL Es lamentable lo que está pasando con el señor EDUARDO MONTEALEGRE LYNETT. No se concibe que ponga en tela de juicio la estabilidad DEMOCRÁTICA de los colombianos y a su vez; actuando como abogado de oficio de TEODORA BOLÍVAR, alias PIEDAD ESNEDA CÓRDOBA RUIZ, la justifique, cuando con megáfono en mano arenga en plena zona de conflicto a los lugareños y a Colombia toda al DERROCAMIENTO del presidente de la República, JUAN MANUEL SANTOS CALDERÓN, por quien voté y de quien me he distanciado desde su postura en contra de quien lo llevó al solio de Bolívar. Pero no será este distanciamiento el que nos lleve a propender por un derrocamiento y peor aún en favor de un grupo NARCOTERRORISTA, que viola a diario los más elementalísimos DERECHOS HUMANOS, DEL HOMBRE Y DEL CIUDADANO. Cuando la Corte Suprema de Justicia lo ungió con sus votos para ocupar el cargo, lo primero que le dijo al país era que este abogado, con serios cuestionamientos éticos, reunía las capacidades intelectuales y profesionales para acceder al mismo; además de ello la Corte y el ungido, garantizaron el cumplimiento de la Constitución y las leyes de la República. Que se diga que sus arengas públicas en zona de conflicto; rodeada de los Indígenas pro Farc y de la Farc misma, son solo exposiciones personales a las cuales todos tenemos derecho, es creer que somos tan o más estúpidos que ellos; y más bien nos hacen pensar que hacen parte de ese componente diabólico y filtrado, que buscan lo mismo desde las esferas socio políticas legitimas, pero en cumplimiento de un preconcebido plan que se asomó imprudente, con lo cual a tiempo los descubrimos y por lo que deben de ser JUDICIALIZADOS. Y si el FISCAL GENERAL se abstiene de hacerlo, llamarlo a juicio JURÍDICO y POLÍTICO por complicidad, por encubrimiento y hasta por coautoría criminal en los mismos tipos que se le atribuyen a TEODORA BOLÍVAR.